Los granos de uva engordan paulatinamente y su color varía del verde brillante a un rojo pálido -en el caso de las tintas- y amarillo claro, en las variedades blancas. Al comienzo del verano es conveniente realizar el “desbrote”, el “desniete” y el “despunte”, para mantener a la cepa con todo su vigor, a finales de Agosto se produce el envero, cambio de color de las uvas hacia el azulado intenso de su maduración. Debido a la climatología de nuestra zona, las uvas sufren un proceso de maduración excelente con altas temperaturas acompañadas de un riego de apoyo con sistema localizado, es decir, por goteo.